Abordaje integral de la enfermedad mental | 14 ENE 16

El ejercicio podría reducir el riesgo cardíaco en personas deprimidas

Vinculan la actividad regular con una reducción en la inflamación y con menos endurecimiento de los vasos sanguíneos

El ejercicio podría reducir las probabilidades de las personas con depresión de contraer una enfermedad cardiaca, sugiere un nuevo estudio.

Las personas deprimidas que no eran físicamente activas tenían la aorta (la gran arteria que lleva sangre desde el corazón) más rígida e inflamada, dos señales de enfermedad cardiaca. Pero en las personas deprimidas que hacían ejercicio, la rigidez y la inflamación de las aortas fue menos común, hallaron los autores del estudio.

"Se ha mostrado que la depresión y la inactividad física se asocian con un mayor riesgo de eventos cardiovasculares", dijo el Dr. Gregg Fonarow, profesor de cardiología de la Universidad de California, en Los Ángeles, que revisó los hallazgos del estudio.

"Aunque se hallaron asociaciones [en el estudio] entre la depresión y la función arterial, que mejoró en las personas que hicieron ejercicio regular, se necesitan estudios adicionales antes de que podamos concluir que el ejercicio reduce el riesgo cardiaco en las personas con depresión", comentó.

El nuevo estudio, publicado en la edición en línea del 11 de enero de la revista Journal of the American College of Cardiology, no se diseñó para probar una relación causal.

La depresión se ha vinculado antes con un riesgo más alto de enfermedad cardiaca y otros problemas físicos. Además, la depresión se ha relacionado con unos peores resultados en las personas con enfermedad cardiaca y otras afecciones, señalaron los autores del estudio.

Hasta el 20 por ciento de las personas hospitalizadas con un ataque cardiaco están deprimidas, apuntaron los investigadores. Y los pacientes con una enfermedad cardiaca tienen el triple de riesgo de contraer depresión que la población general, según los autores del estudio.

Para el nuevo estudio, un equipo dirigido por el Dr. Arshed Quyyumi, codirector del Instituto Clínico de Investigación Cardiovascular Emory de la Universidad de Emory, en Atlanta, reclutó a casi mil personas. La media de edad de los voluntarios del estudio fue de 49 años. Alrededor de un tercio de los participantes eran hombres, y un 39 por ciento eran negros.

Todos los voluntarios del estudio estaban libres de enfermedad cardiaca al inicio del ensayo. Tampoco habían sido diagnosticados con una afección de salud mental.

Los participantes del estudio completaron cuestionarios sobre la depresión y la actividad física. Los investigadores también revisaron varios indicadores tempranos de enfermedad cardiaca.

 

Comentarios

Para ver los comentarios de sus colegas o para expresar su opinión debe ingresar con su cuenta de IntraMed.

AAIP RNBD
Términos y condiciones de uso | Política de privacidad | Todos los derechos reservados | Copyright 1997-2024