Mejoran al Autocuidado

Las consultas médicas compartidas en pacientes diabéticos

Lograron mejorías similares a la que proporcionan la mayoría de los fármacos para la diabetes.

Por Miriam y Stix
 
NUEVA YORK (Reuters Health) - Los diabéticos que concurrieron a consultas médicas grupales en un hospital del Departamento de Asuntos del Veterano de Estados Unidos lograron mejorías similares a la que proporcionan la mayoría de los fármacos para la diabetes.
 
Lograr que los pacientes con diabetes tipo 2 se autocontrolen es un desafío para los profesionales y un equipo opina que las consultas médicas compartidas serían una herramienta útil.
 
Una estrategia que no dio resultado es "sermonearlos", según dijo el autor principal, doctor Jeffrey Kravetz, del Sistema de Atención de la Salud de Asuntos del Veterano de Connecticut.
 
"Las personas aprenden unas de las otras y es más fácil para los que comparten problemas", indicó Kravetz.
 
Cuando la diabetes tipo 2 no se controla con una combinación de medicamentos, dieta y ejercicio puede producir complicaciones graves. Los médicos coinciden en que el mejor enfoque para tratar esta enfermedad crónica es educar a los pacientes en el autocuidado, pero no es sencillo.
 
Kravetz, con el farmacéutico Alexander B. Guirguis y un equipo que incluyó una enfermera especializada en diabetes, un dietista matriculado y un psicólogo, puso a prueba un enfoque distinto: las consultas compartidas, en grupos de entre tres y 10 pacientes, de 90 minutos cada seis y 12 semanas, durante un año.
 
Un cuarto de los 8.000 veteranos atendidos en la clínica Firm A de Asuntos del Veterano de West Haven tenía diabetes, según publica el equipo de Kravetz en American Journal of Medicine. Unos 300 tenían niveles demasiado altos de la proteína en sangre conocida como A1C, que revela cómo se controló el azúcar en sangre en los meses previos. Un valor de proteína A1C por encima del 9 por ciento indica que algo no está bien.
 
El equipo seleccionó a un grupo de pacientes con A1C del 9 por ciento o más y lo invitó a participar de consultas médicas compartidas para el manejo de la diabetes. Antes de la primera consulta, los pacientes aceptaron compartir sus resultados clínicos con el grupo y recibieron "tarjetas informativas" con los resultados de sus análisis de sangre.
 
El objetivo de las consultas de 90 minutos, según explicó Guirguis, era lograr "la interacción de los pacientes, a diferencia de la consulta guiada por el profesional". El equipo revisó los resultados de los análisis de sangre de los pacientes abiertamente y alentó a los participantes a conversar sobre sus desafíos y sus éxitos. La sesión terminaba con unos minutos de preguntas y respuestas y una presentación breve del dietista.
 
Cuarenta de los 60 pacientes seleccionados concurrieron a por lo menos dos consultas grupales, mientras que 19 lo hicieron tres o más veces y 15 asistieron a cuatro consultas. Al final del estudio, el nivel de A1C se redujo un 1 por ciento en algunos pacientes, lo que para Kravetz habría sido similar a la variación obtenida con los fármacos.
 
El equipo halló también que los pacientes tendían a compartir experiencias similares y que podían conversar sobre cómo superar algunos obstáculos para alcanzar un mejor autocuidado.
 
La mayoría de los cambios conductuales estuvieron asociados con la dieta y los medicamentos. Otro beneficio del intercambio con pares es que los pacientes que se resisten a comenzar a utilizar insulina pueden observar a los demás que "están teniendo una vida perfectamente normal", según comentó el autor.
 
FUENTE: American Journal of Medicine