Investigan un tratamiento prometedor para la cirrosis hepática
Científicos argentinos y del exterior identificaron el papel clave de una proteína en el proceso que conduce a esa enfermedad, lo cual podría abrir caminos para nuevas terapias.
Una proteína – SPARC- cumple un rol clave en el desarrollo de la fibrosis hepática, antesala de la cirrosis y también del cáncer de hígado, entre otras complicaciones graves para la salud humana. A este resultado llegó un equipo de científicos argentinos y del exterior.
Ahora, la expectativa es facilitar el diseño de tratamientos biológicos que apunten a inhibir la expresión del gen que produce esa proteína, indicó a la Agencia CyTA uno de los autores del hallazgo, el doctor Guillermo Mazzolini, profesor de Fisiopatología y jefe del Laboratorio de Terapia Génica de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral.
“El gran desafío es tratar de hacer retrotraer la cirrosis una vez que la misma se ha establecido”, subrayó Mazzolini, quien es también investigador del CONICET.
Curar o prevenir la fibrosis hepática evitaría el desarrollo de la cirrosis que en estado avanzado requiere de un transplante de hígado. Asimismo, esa patología puede generar distintas complicaciones para el paciente como el sangrado de varices esofágicas, ictericia, alteraciones de la coagulación, e incluso la aparición de cáncer de hígado.
La etiología de la fibrosis hepática es diversa. Puede ser causada por las hepatitis crónicas por virus B y C, por el consumo excesivo de alcohol o distintas enfermedades autoinmunes o metabólicas.