Una mujer embarazada que usa cinturón de seguridad reduce enormemente el riesgo de que su hijo muera o se lastime gravemente si se produce un accidente de tráfico, según un estudio de Universidad de Michigan (Estados Unidos) que desmiente la idea de que los dispositivos son perjudiciales para el feto.
Los investigadores estimaron a partir de sus resultados, publicados en el “American Journal of Obstetrics and Gynecology”, que si todas las futuras madres usaran cinturón de seguridad podría salvarse la vida de 200 de los 370 fetos que mueren anualmente sólo en Estados Unidos en accidentes de tráfico.
"Los cinturones de seguridad protegen completamente al feto y no usarlos es un enorme problema", explicó el Dr. Mark Pearlman, quien dirigió el estudio. "Cada vez que se suben a un automóvil, las mujeres embarazadas deberían ponerse los cinturones de seguridad sin dudarlo", añadió el autor.
Los investigadores realizaron análisis detallados de 57 colisiones que involucraron a mujeres con al menos 20 semanas de gestación. Doce fetos murieron en los accidentes.
Las embarazadas que tenían puesto el cinturón de seguridad redujeron el riesgo de muerte o lesión fetal en un 84%, en comparación con las participantes que no usaban el dispositivo.
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