Violencia: envían a la Infantería a los hospitales bonaerenses

Por Sebastián Lalaurette
 
Dos integrantes de la División de Infantería comenzaron ayer a custodiar el hospital Mercante, en José C. Paz. Foto: LA NACION / Santiago Filipuzzi

LA PLATA.- El brutal ataque que sufrió una médica que trabaja en el hospital Gobernador Domingo Mercante, en José C. Paz, obligó al gobierno de Daniel Scioli a improvisar un operativo de seguridad: se enviarán 120 efectivos de la División Infantería de la policía bonaerense para ampliar la custodia ya existente en 20 hospitales del conurbano, Mar del Plata y Bahía Blanca.

Así lo informaron fuentes del Ministerio de Seguridad, conducido por Alejandro Granados. Al cierre de esta edición no se había determinado cuáles hospitales recibirían el refuerzo. A esos centros de salud se les asignarían, en promedio, dos policías adicionales por cada turno de ocho horas; anoche se trabajaba para determinar qué cantidad exacta recibiría cada uno.
 
Dos hombres ingresaron a la zona de descanso de los profesionales del Hospital Gobernador Mercante; los empleados hacen un paro de 48 horas.

La decisión fue tomada por Granados y el ministro de Salud bonaerense, Alejandro Collia, después de que se conoció el ataque a golpes sufrido por la médica en el hospital Mercante. Será la cartera de Salud la que debe financiar las horas adicionales de los uniformados que vayan a cada hospital, según se explicó.

Los médicos del hospital Mercante iniciaron ayer una protesta y anunciaron un paro de 48 horas entre hoy y mañana, durante el cual sólo se atenderán las urgencias. La Asociación Sindical de Profesionales de la Salud bonaerense (ex Cicop), en tanto, resolvió una medida de fuerza por 24 horas que se hará efectiva hoy en todos los hospitales de la provincia, en los mismos términos, en protesta por la falta de protección para el personal del sector.

Según el sindicato, Granados se había comprometido en enero último a intensificar la custodia policial en los nosocomios bonaerenses, luego de varios hechos de violencia que tuvieron como víctimas a médicos y enfermeros de distintos establecimientos. Por eso se decidió aumentar el dinero que los efectivos perciben por las horas de servicio adicional que prestan en los hospitales y agilizar su cobro, de manera que esa función les resulte más atractiva.

Pero, según Viviana García, presidenta de la asociación, el gobierno está en falta. "Les exigimos a los ministros de Seguridad y de Salud que cumplan con lo prometido en las reuniones de la Mesa de Seguridad. Iban a designar coordinadores que trabajaran con los hospitales. Iban a poner más policías fuera de los hospitales para custodiar. Iban a hacer un mapa de riesgo. Ahora reaccionan ante un hecho violento en particular, porque no había voluntad política de hacer estas cosas", dijo la gremialista, con marcada indignación.
"¡Basta de inseguridad!"

Ayer, durante una asamblea en el hall del hospital Mercante, los trabajadores exclamaron "¡Basta de inseguridad! ¡No podemos seguir trabajando de esta manera!". El último hecho provocó una gran preocupación y temor: una médica fue atacada por dos delincuentes que la golpearon brutalmente para exigirle la entrega de psicofármacos.

Eran cerca de las 16 de ayer cuando la víctima fue abordada por dos desconocidos dentro de una habitación donde suele descansar el plantel de guardia. A los golpes, le pedían los psicofármacos.

Aunque la directora del hospital Mercante, Eleonora Rossi, dijo a LA NACION que la víctima sólo sufrió lesiones leves en el rostro y el torso, los trabajadores, como la enfermera Norma Jaimes, afirmaron que la médica tenía tajos en la piel hechos con un arma blanca. Incluso, hubo versiones, no confirmadas oficialmente, de que los delincuentes manosearon a la profesional.

Los hospitales ya cuentan con vigilancia policial fuera de los edificios y con "cuidadores civiles" en el interior. Pero los médicos se quejan de que la dotación es insuficiente. "En algunos hospitales hay sólo dos policías que se alternan para vigilar y trabajan cuatro días a la semana, dejando tres días en los que no hay resguardo para el personal ni para los pacientes", explicó García.

En el hospital Mercante ya hay un refuerzo de la custodia policial, que Granados dispuso ayer, informaron voceros del Ministerio de Seguridad: de dos policías por turno se pasó a seis. En tanto, el ministro Collia anunció que además de los efectivos de Infantería se instalarán botones antipánico y cámaras de video en varios hospitales bonaerenses.

"Son medidas que venimos pidiendo hace meses", dijo García. "También reclamamos mejoras edilicias para que los médicos y el público general no tengan que estar circulando por los mismos espacios. Ya se logró elaborar, en 2012, un protocolo para la actuación ante situaciones violentas, pero necesitamos otros elementos concretos para garantizar la seguridad de los trabajadores y de los pacientes", agregó.