En la presente investigación sólo se comunicaron diferencias significativas en la escala de Paranoia del MMPI-R y en la evaluación de autoestima, por lo que se observó a las personas con antecedente de infarto del miocardio como significativamente más perfeccionistas, poco flexibles respecto a sus actitudes e ideas, emotivos y por tanto susceptibles en sus relaciones interpersonales, además de una acentuada minusvaloración de sí mismos, sobre todo en lo que atañe a su situación laboral y a su autoridad familiar.
Con lo que respecta a la ansiedad, la depresión y la hostilidad, quizás las tres dimensiones de personalidad más estudiadas en su asociación con las cardiopatías y en sí con el infarto del miocardio, no se comunicaron diferencias entre los grupos evaluados. No sucedió lo mismo con la autoestima, ya que en esta dimensión sí se comunicaron diferencias entre el grupo de pacientes con infarto del miocardio y el grupo cont
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