Pacientes y Métodos
Se seleccionaron en este estudio 90 pacientes (136 ojos). Los criterios de selección incluyeron: PIO mayor o igual a 21 mmHg, tratamiento con la combinación de betabloqueantes no selectivos plus pilocarpina o dorzolamida o ambas durante al menos 2 años; trabeculoplastia láser previa realizada al menos 12 meses antes de este estudio y sin cirugía bulbar previa.
Los pacientes fueron asignados al Grupo A (adición de latanoprost 0,005% una vez por día al tratamiento preexistente) o al Grupo B (sustitución del tratamiento preexistente por latanoprost 0,005% una vez por día) de acuerdo al número de fármacos administrados concomitantemente al betabloqueante (1 ó 2), a los valores de PIO (3 grupos: 21 - 23 mmHg, 24 - 26 mmHg, > 26 mmHg) y al uso de pilocarpina. Los pacientes pertenecientes al Grupo B realizaron un período de descanso de 30 días del tratamiento preexistente antes de comenzar el estudio.
Durante el período de seguimiento de 90 días, se realizaron 3 lecturas de la PIO (8:00 AM, medianoche y 4:00 PM) en los días 15 ± 2 y 90 ± 3. La hiperemia conjuntival y el crecimiento de las pestañas fueron evaluados por dos observadores independientes en cada Centro y se realizó una comparación por medio de 4 fotografías estándares. No se detectaron cambios en el color del iris durante el estudio.
El gráfico muestra el promedio de la PIO: a valores basales, al finalizar el período de lavaje de 30 días para el Grupo B y a los 90 días. Los pacientes del Grupo A que reciben pilocarpina tienen una PIO más alta al finalizar el estudio, que aquellos que no la reciben (21.2 ± 2.7 mmHg vs 19.2 ± 1.7 mmHg; p=0.005).
En los pacientes del Grupo A se observa una reducción promedio de la PIO del 16%, al finalizar el estudio. En este grupo el 39% de los ojos no alcanzaron una reducción promedio de la PIO mayor o igual al 15% con respecto a los valores basales.
En el Grupo B se observa una reducción significativa de la PIO y sólo el 4% de los pacientes muestra un aumento de la misma.
Los efectos adversos se limitaron al disconfort, el Grupo A experimentó un incremento en la hiperemia = grado 2 del 14.7% y para el Grupo B fue de 22%.
Conclusiones
Se concluye que en los pacientes con insuficiente control de PIO con un tratamiento combinado de máxima tolerancia, puede ser beneficioso la adición de latanoprost al tratamiento preexistente o la sustitución del mismo por una monoterapia con latanoprost. Con la adición de latanoprost al tratamiento combinado es más probable obtener presiones intraoculares menores o iguales a 18 mmHg. El reemplazo del tratamiento preexistente por una monoterapia con latanoprost está asociado a una menor incidencia de efectos adversos locales y mayor cumplimiento del tratamiento.
Síntesis y traducción: Dr. Martín Mocorrea, editor responsable de Intramed en la especialidad de Oftalmología.